Por María Luz Durán, Lic. en Turismo Cultural
En la Basílica Sagrado Corazón de Jesús, ofrecen un servicio integral de acompañamiento de personas en situación de calle. Queremos contarte cómo, desde tu lugar de vecino, podés colaborar con el mismo.
Cada sábado, la Basílica de Sagrado Corazón de Barracas recibe 150 visitantes, aunque en los registros figuran más de 1500 personas que, al menos, vinieron un sábado a ducharse. Además de los baños, de desayunar y almorzar, hay peluquería, talleres, espacios de asesoramiento, escucha, recreación, esparcimiento, atención médica brindada por la Asociación Civil “¿Me regalas una hora?” y servicio de intermediación laboral llevado a cabo por la Fundación Multipolar.
Se estima que la mitad de los concurrentes pasa las noches en paradores de la ciudad, si es que encuentran lugar, mientras que la otra mitad lo hace en las calles, plazas, esquinas, cajeros y recovecos de la ciudad. Durante la mañana del sábado, ”El Sagrado” abre sus puertas y se vuelve su hogar: allí desayunan, se duchan, almuerzan, participan de los talleres y servicios brindados, se construye comunidad y retornan luego a su difícil rutina de supervivencia.
A lo largo del 2018, unas 30 personas consiguieron trabajo y varias de ellas lograron salir de la calle o del sistema de paradores. Para interiorizarnos más sobre esta solidaria tarea, entrevistamos a Bárbara y Pablo, ambos colaboradores de las duchas.
Conocemos el lugar como “las Duchas” pero sabemos que hay mucho más que eso ya que al ingresar al lugar apreciamos a las personas en situación de calle perdiendo la invisibilidad: leyendo un libro, conversando, agradeciendo Io recibido y jugando.
¿Cómo describirías la dinámica del lugar? ¿Qué se quiere lograr?
Es un centro barrial que acompaña a las personas ofreciendo medios y herramientas para que redes-cubran su dignidad. Pretende acompañar hacia la promoción humana y social del sujeto que se acerca a pedir ayuda. Realmente es una gran familia que durante algunas horas, hace del Sagrado su hogar.
¿Cómo funciona el sistema de viandas?
Somos un equipo de gente que adherimos al dispositivo de atención y que queremos colaborar con aquellas personas que están en situación de máxima vulnerabilidad, acercándonos con algo de comida rica y casera. La vianda consta de una porción de comida que se pueda comer con las manos y que no necesite heladera. Se compone de algo salado (por ejemplo un sándwich), una fruta y algo para tomar. Se entrega a aquéllos que por una cuestión de espacio no llegan a entrar al comedor. Además colaboramos con las tareas previas al sábado mismo, conseguimos por ejemplo, donaciones de facturas para el desayuno, nos encargamos de retirarlas y llevarlas el sábado a primera hora. Los comerciantes amigos están siempre presentes y nos ayudan mucho con verduras, productos de limpieza, entre otras cosas.
¿Cómo pueden participar los vecinos?
Todos son bienvenidos a participar! Los invitamos a que se acerquen a visitarnos un sábado y que conozcan las duchas en movimiento. Son muchas las formas de colaborar: Pueden hacerlo preparando viandas, donando comida y/o poniendo a disposición movilidad para retirar las donaciones y llevarlas a la basílica. Es un lindo grupo donde creemos que nos acercamos a dar pero a la larga, nos damos cuenta que es mucho más lo que nos llevamos. Los sábados comprobamos que el amor que ponemos al servicio de las viandas vuelve multiplicado por mil.
¿Qué otros servicios les gustaría incorporar? ¿Cuáles son los profesionales que pueden donar al menos unas horas, para esta buena causa que nos ayuda a todos?
Somos parte de esta sociedad y creemos que si hay menos dolor y sufrimiento, también tendremos menos violencia en las calles y un lugar más equitativo para vivir. Muchas de estas personas logran reinsertarse en sociedad con un pequeño aporte de todos.
Siempre estamos dispuestos a recibir trabajadores sociales, psicólogos, psiquiatras, acompañantes terapéuticos, consejeros en adicciones, psicólogos sociales, talleristas, abogados, y counselors.
Es muy importante si pueden dar un taller dejándonos sus conocimientos, por cuanto aporta mucho al cambio y no importa si es de un día o de un año!
Como conclusión y reflexión personal, creo que a veces nos sentimos frustrados cuando vemos gente en situación de calle y seguimos bajando la mirada sin saber qué hacer. Esta es una oportunidad para integrar el cambio, con un pequeño granito de arena logramos hacer algo por el otro e intentar darle una posibilidad de reinserción en este duro sistema.
Contacto: Basílica Sagrado Corazón de Jesús, Av. Vélez Sarsfield 1351, Barracas. Duchas: Sábados de 9 a 13 hs. Parroquia: 4301-0142. Bárbara García 15 5061 8367. Email: bgarci32809©gmail.com